sábado, 10 de septiembre de 2011

La burbuja inmobiliaria, el perfil del español en esos días y las consecuencias.


 El fenómeno económico acaecido en nuestro país hasta hace bien poco, la burbuja inmobiliaria, es uno de los grandes hándicaps, casi insalvable, que trae en jaque actualmente a nuestra economía por los devastadores efectos de su estallido.


 Los años dorados en el que el país creció económicamente en unas tasas irreales a costa del endeudamiento están pasando una brutal factura que nunca previnieron nuestros políticos. Los ayuntamientos descubrieron el maná por el que siempre suspiraron con la oferta de su suelo. Los concejales de urbanismo tenían más poder en dichos entes que los mismos alcaldes y la ola de corrupción que atrajo el dinero fácil vino propiciada, casi en su totalidad, por esta misma burbuja que todos conocimos... sin olvidarnos de los bancos que concedieron hipotecas desmesuradas, eternas, sin más garantía que el ladrillo prácticamente y a diestro y siniestro. 


 Pero no siempre les va a tocar a los políticos, banqueros y demás castas el cargar con la culpa. Quizás los grandes culpables de dicha burbuja fue el pueblo, nosotros mismos, que nos entregamos a la firma de hipotecas eternas con cláusulas asesinas con un afán desmedido. El endeudamiento familiar se disparó como nunca antes se había conocido en nuestro país... y muchos compraban pisos sin necesidad básica de él sino como bien para especular, sobre plano, revendiéndolos  y obteniendo un "pase" suculento sin mediar otro trabajo de por medio que la firma de un crédito rápido para obtener la entrada de dicho piso.



 Aquí os dejo un testimonio sincero, honesto y verídico de uno de tantos millones que practicaron la burbuja en nuestro país... y el que no la practicó se quedó con las ganas de hacerlo, no crean que lo hizo por convicción, cordura o principios. 


 Este era el perfil españolito medio de aquellos años que tanta rémora ha dejado pendiente. Dicho testimonio está recogido del foro de invertia.com y a todos se nos vendrá a la memoria algún conocido leyéndolo.


Yo soy el reflejo de España.

Como siempre voy a intentar explicar un tema Macro con un ejemplo micro: las familias.

No hace falta estudiar económicas (incluso dudo que muchos economistas realmente hayan estudiado algo) para entender que pasó, qué está pasando y que desenlace habrá. Me baso en el muy bien explicado comentario de Know sobre qué es el PIB y por qué esta situación sólo puede desembocar en suspensión de pagos o alguna fórmula de cambio de sistema desechando el actual como si nunca hubiera existido, es decir una quita mundial.

Durante algunos años buenos y con pleno empleo conseguí un buen empleo bien retribuído. Con el tiempo decidí comprar una casa y como no disponía de todo el dinero para pagarla fui al banco. El banco no me dijo que tipo de casa me podía comprar, pero sí cuanto me podía gastar por lo que yo me basé en cuánto me prestaban para elegirla. Al final me compré una casa vieja, pero grande que me tasaron en esa cantidad y me dieron una hipoteca. Seguí trabajando y me subieron el sueldo. El banco me invitó a pedir dinero prestado para comprarme un buen coche puesto que me habían subido el sueldo y meses despues acepté su proposición y pedí el dinero que me ofrecían y me compré un coche en consonancia con el dinero que me brindaban. Mi mujer dejó de trabajar puesto que con mi sueldo bastaba y se quedó embarazada, tuvimos un hijo precioso. Como es normal el banco me dijo que me comprara otro coche para ella, así lo hice. El Banco era como un padre que sabía aconsejarme y me dejaba dinero.

La cosa fue cambiando poco a poco, cada vez hacía menos horas extra hasta que un día me quitaron los pluses y me despidieron aunque era indefinido. Busqué otro trabajo, pero ahora pagaban peor por lo que mi mujer se puso a buscar empleo, pero con cargas nadie la contrataba por lo que vendimos un coche para ahorrar aunque no estaba aun pagado, pero nos consolamos con lo que ahorraríamos en gasolina y seguros. Los ahorros menguaban y cortamos el fijo, dejamos de salir a comer por ahí, usábamos la luz racionalmente, quitamos los móviles...pero no bastaba porque yo ya ganaba menos de lo que pagaba por mi financiación y como ya no era una persona triple A si no C mis deudas no eran negociables y si novaba la hipoteca me daban más tiempo para pagar, pero debería más dinero. Cuando los ahorros se terminaron dejamos de pagar un préstamo, luego otro, luego tiramos de tarjetas que tampoco pudimos pagar (rescates finacieros), y al final la hipoteca se hizo inasumible por lo que acabamos desahuciados. Me despidieron de mi empleo porque le dijeron a mi jefe que era un moroso. Ya sin ingresos no teníamos salida y debíamos más de lo que podríamos pagar en dos vidas y no teníamos nada por lo que pedimos ayuda a nuestras familias (estados de la UE) Dios sabe que nos quisieron ayudar pero algunos ya tenían bastante con lo suyo y quienes nos aceptaron cargaron con nuestros problemas y acabaron en ruina también.

No explico como acabó la historia porque es el drama de un millón de familias española que cada una acaba de distinta manera, pero es lo que le va a pasar a España y la UE. No se puede intentar ahorrar cuando se debe demasiado para pagar las deudas puesto que al final no hay ni ahorros ni liquidez.

Sólo hay una solución guardar liquidez e impagar. Taparse los oídos de los insultos por moroso y sobrevivir.

Si se pagan las deudas te arruinas y te quedas sin dinero. Si no las pagas sobrevives como un bicho vil, pero sobrevives.

No olvidemos que el dinero que debemos estado y personas no es de un amigo ni de un vecino, es de un Banco. Los Bancos no tienen dinero por lo tanto ese dinero que prestaron nunca existió y para que todo esto se arregle de verdad hay que hacerlo latente no devolviéndolo.

Por cierto este caso no tiene nada que ver con mi vida por si alguien ha pensado algo raro. Sólo es mi visión del problema.

Del forero Elsaberokupalugar, del foro de Rankia.com

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